Maurice Closs, quiere volver y para eso empezó un juego de instalación, tiene que limpiar su imagen y ya en algunos medios comenzaron con la campaña de que sigue manteniendo una imagen positiva entre los misioneros, dejándolo así en un grilla de los posibles candidatos a senador para el 2017. Esto a pesar de que desde la Renovación aclaran que está «recontra bien pago» como diputado y que «hasta no termine su mandato ni sueñe con aspirar a otro cargo».

El juego de intereses de algunos medios parecen no tener en cuenta que Closs es el responsable político de la situación económica de la provincia, y de los principales desfalcos locales de los últimos años, especialmente el vaciamiento de EMSA, y la gente no olvida aunque algunos la subestimen.

Lo cierto es que lo que esconde esta nueva campaña mediática del ex gobernador es su idea de volver al poder, quizás no sea el que encabece la «opción superadora al consenso», como le gusta decir a su mesa chica que volvió a hacer semi-públicas sus reuniones, pero puede llegar a ser uno de los principales financistas.

Closs no solo es diputado nacional y un millonario empresario del turismo, sino que cree que con sus millones pude generar poder. Para él, en estos momentos, el llano significa peligro y desprotección y muchos ya saben que su núcleo duro está organizando una embestida interna en la Renovación y que una de las posibilidades es terminar en el 2019 en otro esquema con un candidato propio, quizás con el mismo que está evaluando la oposición, una astilla del mismo palo.