Tras ganarle por 2-0 a Colombia, Chile se metió en una nueva final de la Copa América. El campeón de la edición 2015 quiere repetir la coronación en esta edición que conmemora el Centenario de la primera vez que se jugó la competición.

A diferencia del año pasado, ya no está Jorge Sampaoli conduciendo los hilos del equipo, pero Juan Antonio Pizzi comenzó con el pie derecho su ciclo.

«Hay felicidad por haber superado a un rival dificilísimo, por instalarnos en la final y por superar problemas desde el último partido a este. Estamos contentos de poder disfrutar una nueva final. Cuesta muchísimo llegar hasta aquí, siempre el hecho de llegar es reconfortante», declaró el técnico.

El rival en el encuentro definitorio se repetirá. Pizzi ya parece haber olvidado sus orígenes santafesinos y piensa en ese encuentro como un chileno más.

«Todos saben la necesidad de ellos de lograr el título y el respaldo que tendrá en la final. Pero nosotros sentimos el apoyo de los 17 millones que sufren y mandan buenas sensaciones. Usaremos esa energía para competir con una de las mejores selecciones del mundo», comentó en referencia a los 23 años sin títulos oficiales de la Selección y dejó en claro que confía en los suyos: «No venimos de menos a más, sí llegamos más fuertes».

Como DT de La Roja, ya se enfrentó a la albiceleste en dos ocasiones, una por Eliminatorias y la otra en el debut de esta competencia: fue derrotado en ambas ocasiones.

«Todo lo que hemos ganado lo hemos merecido, nadie nos ha regalado nada. El proceso que llevamos ha sido equilibrado, hemos tenido momentos malos, pero a medida que pasan los partidos, el equipo va generando autoconfianza y eso les permite rendir a un nivel alto», aseguró.