El intendente Waldomiro Dos Santos, señaló que «la situación es complicada a partir de que hay muchos despidos por bajas en las ventas. No hay muchas medidas que tomar, sino esperar que el país vuelva a funcionar para que salga esta producción que está apostada en los aserraderos», afirmó. En tal sentido comentó que la situación escapa al municipio y la provincia, «las construcciones paralizadas y el bajo consumo hace que no haya demanda y tampoco venta. Varios empresarios entienden la situación y esperan que la situación se revierta», remarcó. Además Dos Santos consideró que los depósitos están llenos de material a raíz de que nadie parece interesado en comprar y estimó que las ventas aumentarían si se reactivara la construcción. El jefe comunal señaló además que el sector comercial también atraviesa una dura crisis por las asimetrías con países vecinos. «Se ha notado una gran parálisis en las ventas. En especial en la venta de muebles y de alimentos. Hay muchos que van a comprar a Brasil o a Paraguay», remarcó. El alcalde observó también que ante la falta de actividad se ve todos los días a los comerciantes y a sus empleados parados en la puerta de sus locales y mirando para la calle.