Los últimos avances en la enfermedad de Alzheimer apuntan a frenar los síntomas y el deterioro cognitivo. Los expertos creen ahora que los procesos biológicos detrás de la condición neurodegenerativa comienzan años, hasta décadas, antes de que los problemas de memoria y confusión se hagan evidentes.

En la Conferencia Anual de la Asociación Internacional de Alzheimer -que se lleva a cabo del 18 al 23 de julio en Washington, Estados Unidos-, investigadores anunciaron que una serie de sustancias presentes en la saliva pueden distinguir a las personas que experimentan un envejecimiento normal, de aquellas con demencia cognitiva leve (que en algunos casos puede conducir a la enfermedad de Alzheimer), y la enfermedad de Alzheimer misma.

La investigación estuvo a cargo Shraddha Sapkota, neurocientista de la Universidad de Alberta, que junto a sus colegas, analizaron cuidadosamente muestras de saliva de un grupo de voluntarios que participaron en un estudio de envejecimiento. Algunos habían sido diagnosticados con la enfermedad de Alzheimer, otros con deterioro cognitivo leve, mientras que el último grupo no tenía condiciones neurológicas.

Mediante la comparación de los componentes de la saliva, los científicos encontraron que cada uno de los tres grupos mostraron ligeramente diferentes patrones de compuestos, que podrían formar la base de una forma no invasiva para determinar detectar las personas que están en mayor riesgo.

Fuente: Diario Hoy.